Buenas tardes,
¿Qué tal estáis? Hoy en Planeta Futuro llevamos un tema que me ha hecho pensar en la importancia de la representación y del poder de la costumbre. Es este sobre cómo una iniciativa impulsada por dos organizaciones africanas, Speak Up Africa y Africa No Filter, pretende que se sustituya el mapa tradicional por otro que refleje de forma más fidedigna las proporciones de los continentes. En el planisferio clásico, creado por Gerardus Mercator en 1569, África aparece empequeñecida en comparación con otros territorios como Groenlandia o Canadá. Esto se debe a que el mapa, que fue creado para favorecer la navegación, provoca mayores distorsiones conforme nos acercamos a los polos, por lo que Groenlandia se ve similar a África, cuando realmente es 14 veces más pequeña. Correct The Map, así se llama la campaña, pretende que se adopten proyecciones menos distorsionadas, como la Equal Earth, para así reflejar mejor el tamaño de África en comparación con el resto del mundo. La Unión Africana (UA) acaba de respaldar esta reivindicación histórica, que iniciativas como la que te contamos han reavivado en un momento de ruptura postcolonial y de reafirmación de la identidad africana.
Con este tipo de noticias corremos la tentación de pensar que no importa, que es solo un mapa, que corregir estas distorsiones no cambiará nada frente a problemas “más acuciantes” o graves que enfrenta el continente africano, como la mala gobernanza, la pobreza, las enfermedades o la inseguridad alimentaria. Sin embargo, si escuchamos a muchos africanos, nos damos cuenta de que esa representación también importa. Los símbolos y las imágenes conforman nuestro imaginario, nuestro lugar en el mundo y cómo se nos percibe ahí fuera. Refuerzan estereotipos y ayudan a destruir otros. Nos colocan en relación con los demás. Al hilo de todo esto, os dejo un par de frases que me dijeron dos personas con las que hablé para el artículo y que vienen a decirnos que un mapa nunca es solo un mapa.
Esta, de Carlos Lopes, de la Universidad de Ciudad del Cabo, que me contaba que el cambio de tamaño “no borrará la desigualdad, pero ayudará a corregir un sesgo subconsciente. Un mapa más justo dice: el mundo es redondo, diverso y compartido”. Y esta otra de Fara Ndiaye, directora ejecutiva adjunta de Speak Up Africa. “Mostrar a África con su tamaño real refuerza el orgullo y la confianza entre los africanos y especialmente entre la generación joven”.
Además de los mapas, esta semana en Planeta Futuro hemos continuado con la mirada puesta en Afganistán, Gaza, Sudán y República Democrática del Congo.
El pasado viernes fue el cuarto aniversario de la toma de Kabul que reinstauró el régimen talibán en Afganistán. Un régimen que ha sumido a las afganas en lo que la ONU define como un “apartheid de género”. Los talibanes han ido reduciendo los derechos de mujeres y niñas, privándolas de educación, libertad de movimiento e incluso de su propia voz. Sin embargo, la resistencia de las afganas se abre paso de muy diversas formas, también a través de la lectura. En este reportaje te contamos cómo funcionan los clubes de lectura secretos en WhatsApp y Telegram para mujeres en Afganistán.
También de mujeres valientes habla nuestra compañera Beatriz Lecumberri en este reportaje sobre reporteras en Gaza. En él, periodistas gazatíes describen las dificultades añadidas que experimentan en su cobertura de la guerra, como la falta de visibilidad, el peso de una sociedad patriarcal y una complicada falta de intimidad.
En Sudán, un país sumido en una guerra que dura más de dos años y que ha provocado la mayor crisis humanitaria del mundo, 1,3 millones de personas han regresado a sus hogares en el centro del país, tras la toma de la capital por parte del ejército sudanés el pasado marzo. Marc Español nos explica que ese retorno es amargo, ya que se encuentran urbes arrasadas, inseguridad y economías colapsadas. Además, nos trasladamos a República Democrática del Congo, donde explicamos cómo el conflicto armado provocó la huida de los cultivadores de café congoleños y cómo esto ha afectado a los cultivos.
Muchas gracias por leernos.
Un abrazo y hasta la próxima semana
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