¡Buenos días!

Hoy encontraréis noticias insólitas: un  fiscal general sometido a juicio por revelar secretos que otros ya habían publicado; un gobierno, el de Israel, que bombardea al país que actúa como mediador en su guerra contra los palestinos; un ejército invasor que lanza octavillas sobre una población exhausta y hambrienta para que se desplace "por su seguridad" a otro lugar que todos saben que también va a bombardear. Y, de esta madrugada, una noticia aún en desarrollo: el derribo por parte de Polonia de varios drones rusos tras una “violación sin precedentes de su espacio aéreo”.

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Contado así, no me negaréis que todo esto dibuja un mundo retorcido y extraño. 

Sí, la causa del juez Ángel Hurtado contra el fiscal general sigue adelante. El Tribunal Supremo abre juicio contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la supuesta filtración de un correo electrónico en el que el abogado de la pareja de Isabel Díaz Ayuso reconocía dos delitos fiscales y proponía un pacto de conformidad con la fiscalía para evitar la prisión. Ese correo ya había sido utilizado por el propio entorno de Ayuso para generar noticias falsas que tergiversaban los hechos, lo que obligó a la fiscalía a restituir la verdad. La decisión del Supremo abre una situación insólita en la historia de la democracia española. 

• En el auto de apertura de juicio, el juez Hurtado impone una fianza al fiscal de 150.000 euros. En el cálculo utiliza un criterio declarado inconstitucional: la multa prevista supone una anticipación de la pena.  Nuevo motivo de controversia en una instrucción ya muy polémica.

• Dadas las connotaciones políticas de esta causa, resulta muy relevante la composición del tribunal. Nos la detalla aquí Reyes Rincón. Hay mayoría conservadora, con Manuel Marchena y Carmen Lamela entre los togados. Núñez Feijóo volvió a exigir la dimisión de García Ortiz mientras el Gobierno reiteraba su confianza en él.

Nueva escalada del Gobierno de Israel en la extensión del conflicto de Oriente Próximo. Ya había matado a líderes de Hamás en Líbano o Irán, pero esta vez los ha atacado en una zona residencial de Doha, la capital de Qatar, el país que actúa como mediador en las negociaciones para alcanzar una tregua en Gaza. La milicia islamista ha reconocido que cinco de sus miembros han muerto en el bombardeo. Estaban reunidos para analizar la última propuesta de alto el fuego. 

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• Mientras tanto una lluvia de octavillas caía sobre Ciudad de Gaza para conminar a sus desesperados habitantes (más de un millón) a desplazarse hacia el sur si no querían morir en la ofensiva final con la que el ejército pretende arrasar la capital. La cuestión es que les envían a un lugar en el que no caben y en el que saben que también les van a bombardear.

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• Así que muchos han decidido quedarse: “Aquí estamos ya todos muertos. Es solo cuestión de tiempo”. 

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• La flotilla de la solidaridad sigue su camino hacia Gaza no sin sobresaltos: dos drones han provocado sendos incendios en apenas 24 horas, uno de ellos en el el barco en el que viaja Greta Thunberg. ¿Aviso para navegantes?

La situación política en Francia es tan delicada que no admite titubeos. El presidente Emmanuel Macron se apresuró ayer a nombrar un nuevo primer ministro para tratar de cerrar (al menos temporalmente) la crisis abierta por la dimisión de François Bayrou. Eligió a uno de los miembros más longevos de su gabinete, el ministro de Defensa Sébastien Lecornu. Es también de perfil conservador y será el quinto jefe de gobierno de esta legislatura, que comenzó en 2022. 

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• El nuevo jefe de gobierno